Nada de lo que hacemos o decimos se pierde en el vacío. El aire está lleno del pensamiento de todos. Almafuerte. (1854-1917)

domingo, 2 de febrero de 2014

Plotino y la Estética

Plotino fue un filósofo neoplatónico nacido en el 204 d.C. Gracias a su afición por las artes, desarrolla el tema de la Belleza y la Estética como  parte independiente de la Filosofía.
En sus tratados se menciona la luz, la simetría, las formas y los materiales. Pero si la para la filosofía griega la simetría representaba la belleza, esa opinión era válida también para la obra de arte. Plotino se pregunta ¿Cómo puede un rostro simétrico aparecer unas veces bello y otra carente de belleza? La respuesta  lo lleva a rechazar la simetría como concepto de belleza. Dice que si la simetría es realmente la esencia de la belleza solo puede ser hermoso un todo compuesto de partes individuales, mientras que las partes o elementos individuales no lo son, ya que carecen de partes. Por tanto, no poseen una relación interna. Su conclusión es que la belleza es simple, no compuesta, y de ahí no puede ser definida de forma precisa.

La  belleza “es algo que se percibe a primera vista, algo que el Alma reconoce como si la conociera de antiguo e identificándola forma unión con ella. Pero deja que el Alma se hunda en la Fealdad y enseguida se retraerá, rechazará el objeto, se apartará de él disconforme, ofendida”.[1] A la Belleza la diferenciamos porque posee una naturaleza similar a la del Alma.

Por tanto lo que cautiva al espectador no es la simetría equilibrada, ni el virtuosismo del artista o su perfecta destreza en su ejecución; es más bien, una cualidad que “brilla” y con la que el Alma mantiene una vinculación directa. Para corroborar sus teorías, toma ejemplos simples como el encanto del color, de la luz del sol, el destello del oro, las estrellas del cielo, un bello paisaje o el fuego que no se puede explicar en términos de simetría.

El nuevo énfasis puesto en el artista y en el espectador en la expresión, más que en la estructura mensurable, discurre paralelamente a la importancia que se concede a los “efectos pictóricos” de luminosidad, color y brillantez. [2]

Estas ideas nuevas darán lugar a una evolución en el mundo del arte y del pensamiento. Incluso algunas de sus intuiciones fueron explotadas por el cristianismo que tomó su teoría en cuanto al poder de las imágenes.

 Plotino pensaba que sin ellas el mundo visible de los dioses desaparecería de la vista de los hombres, así las imágenes fueros rescatadas del descrédito en que Platón las había sumido. “Las imágenes eran necesarias para ver lo que no se podía descubrir a simple vista. Por medio de ellas, realidades lejanas alcanzaban a reflejarse en la tierra y ofrecer a los hombres su rostro bondadoso.” (…) La creencia en lo invisible, se sostenía gracias a la presencia de imágenes.” (…) “El retrato era el arma que los dioses tenían ahora para alentar a la humanidad.”[3]

Este texto forma parte del trabajo realizado para la asignatura Teoría del Arte del Grado de Hª del Arte.



[1] Tratado sobre la Belleza (1.6.2) Plotino. Citado por B.
[2] M. BARASH. Teorías del Arte. Edit. Alianza. Madrid1995. Pág. 47
[3] P.A. El ojo y la sombra p 41